viernes, 3 de agosto de 2012

Capítulos 7 y 8

Capítulo 7- ¿A mi casa?

-¡No estoy celoso! -volteé y le guiñé un ojo. Escuché como bufó.


-Hey, Jess -volteé. Ay, no. Era Chris. No, no, no, no, ¡no le respondas!
-Hola -dije sin mirarlo. ¡Estúpida!
-¿Estás bien?
-¿Por qué no lo estaría? -pregunté indiferente
Él sonrió de lado y me miró pícaramente.
-Por lo del beso
-¡No me mires así! -dije
Se puso a reír.
-Sólo fue porque Chaz... no sé por qué fue -dije rindiéndome
-Está bien... entiendo que te guste Justin, pero te advierto... -lo interrumpí
-No me gusta Justin, bobo -lo empujé
-No, te encanta
-¡Basta! -froté mi rostro- ¿Qué tengo que ponerme para tu fiesta?
Él me miró extrañado.
-Ropa formal
-Bien, nos vemos
-Yo esperaba... -lo interrumpí
-Nos vemos, dije
Él rió y puso una mano en mi espalda, dejándome pasar y se fue hacia el lado contrario.
No me gusta Justin... ¿verdad? Quiero decir, no, claro que no.
-Así que besaste a Chris... -escuché a Julia por primera vez en el día
-¿De dónde saliste?
-De mi mamá, ¿vos?
Reí. Típico de ella hacer esas bromas.
-No, tonta. ¿Recién llegás?
-Sí, me había quedado dormida -se encogió de hombros-. Pero no respondiste mi pregunta
-Sí, me besé con Chris. Pero no por lo que crees
-Yo me refería a la de dónde saliste... -dijo con tono decepcionado
Volví a reír.
-¡Chicas, ahí están! -se escuchó a Paula
-Holis -dije
Nos saludamos todas y seguimos caminando hasta el salón.
-No saben lo que acabo de enterarme -anunció
-¿Qué? -preguntamos ambas a la vez
-Chismosas -volteó los ojos divertida
-¡Ya, decinos! -le pegué en el brazo con el dorso de la mano
-Bueno, es que a Lucía, según me dijeron, le gusta...
-Hola
Todas volteamos a ver a Justin. Rodeó mis hombros con su brazo y siguió caminando con nosotras como si nos conociéramos de toda la vida. Por lo que querdamos: Julia, Paula, yo y Justin a mi lado.
-...Justin -terminó Paula en un susurro
Mis ojos se abrieron y paré de caminar.
-¿Justin? Quiero decir... ¿ese Justin? -lo señalé a mi lado
-No, bueno. Sólo me refería a '¡sí, Justin está con nosotras!' -dijo con falsa emoción- Pero en realidad, iba a decir Chris
-¿¡Chris!? -dijimos Julia y yo a la vez
-¿El Chris que ella besó? -preguntó Julia señalándome
-¿El Chris que yo besé? -dije
Julia y yo nos miramos.
-¡Hey! -dijimos a la vez
Justin estaba centrado en la conversación y ya no me rodeaba con el brazo.
-No puedo creer que hayas besado a Chris -dijo
Todas lo miramos.
-No hay tiempo para escenitas de celos, después lo discuten -dijo Julia-. ¡¿Le gusta Chris?! -se dirigió a Paula
-¡No griten!
-¡No son escenas de celos! -se quejó Justin
-Sos tierno cuando no te hacés el creído -le dije. Era más alto que yo, así que tuve que mirar hacia arriba
Él sonrió.
-Siempre soy tierno, gatita
Volteé los ojos tratando de esconder mi sonrisa y volví mi mirada a mis amigas.
-Tengo que hablar con ella -dije 
-Ahora está con Chaz
-Uuh -dijo Justin. Todas volvimos a mirarlo-. ¿Qué? -preguntó él
-Acompañame -tomé su brazo y lo arrastré junto a mí
-¿A dónde vamos? -dio unos pasos rápidos para alcanzarme, y pasó su brazo por mis hombros
-A buscar a Lucía -le respondí. Comenzamos a bajar las escaleras, y saqué su brazo de alrededor mío




Bueno, al final ella no se enojó. Gracias al cielo... Una vez que llegué a casa, me puse un short de algodón y una remera de tirantes color blanca. Luego me tiré feliz a la cama para poder dormir. Mamá llegaría en una hora y tenía tiempo antes de almorzar con ella.


-¿Hola? -dije por el celular. No sé quién carajo era pero había interrumpido mi bendita siesta.
-Jessi, escuchame una cosa... ¿estabas durmiendo? -era mamá. Dios, decí lo importante así duermo de una vez
-Sí, ¿qué pasa?
-Voy a tardar un rato más, estoy en la oficina. Ahora va a ir a casa una amiga, se va a quedar en mi habitación, ¿sabés?
-¿Quedar a qué? 
-No puede pagar el alquiler de su casa y va a ir con su hijo. Creo que lo conocés... no me acuerdo cómo se llama, es algo raro como...
-Bueno, no importa. ¿A qué hora llegan? 
-Como a las tres y media.
-¡Son las y cuarto!
-Bueno, Jessica. Andá cambiándote. 
-Bueno... chau
-Chau, un beso
Fin de la llamada


¡¿Por qué?! Yo que quería dormir... 
No me cambié, sólo me puse un saco de lana y me lo cerré superponiendo un lado con el otro. Habían tocado el timbre. Caminé por el pasillo y me miré en el espejo que estaba al final de este. Tenía hecha una cola alta en el pelo y estaba un poco hacia el costado. Entré al living y la atravesé, para dirigirme a la puerta principal. La abrí, y allí estaba una mujer de unos treinta y cinco años, con una sonrisa encantadora.
-Hola -dije
-Hola -me respondió-. Vos debés ser Jessica... ¿verdad?
-Sí... -dije esperando más
-Soy Pattie, amiga de tu mamá. Mi hijo y yo nos vamos a quedar acá por un tiempo y...
-Ah, sí, mi mamá me dijo -le sonreí-. Pase -abrí un poco más la puerta
-Gracias, permiso. Mi hijo ahora viene con las cosas -dijo después de saludarme
-Está bien. Pasá, sentate -dije yo 
-Gracias, cielo 
-De nada -sonreí
Me caía bien, era de esas personas agradables, felices. Y simpáticas.
-Perdón, ma. Es que esto está pesado -me miró-. Hola, Jess -se acercó y me dio un beso en la mejilla, sonriendo al verme más confundida que nunca
-¿Justin?
-¿Se conocen? -preguntó Pattie sonriendo tiernamente
-Somos compañeros de clase -explicó él, mientras yo cerraba la puerta aún sin creerlo 
Pasamos todos al living, le indiqué a Pattie dónde estaba la habitación de mi mamá. Luego ella pasó al baño y yo volví al living. 
Justin estaba sentado en el sillón con su celular. Al entrar me miró.
-¿No tenías algo más corto? -dijo mirando mis piernas
-Estaba durmiendo -lo miré detenidamente. Tenía puestos unos jeans negros y una camiseta de mangas cortas blancas con una camisa a cuadros arriba. Nunca lo había visto así, es lindo como se viste.
Él rió. 
-¿Qué? -pregunté, y me senté a su lado
-Entiendo que sea lindo, pero disimulá un poco al verme 
-Bobo -lo empujé levemente. Él me miró divertido
-Hey, sobre lo de ayer...
-¿Qué cosa? -dije
-Lo del beso -sonreí. ¿Iba a pedirme disculpas?
-¿Qué hay con eso?  
-Perdón -levanté una ceja-. Estaba enojado por... lo que habías dicho 


Flashback
-No quería negarte tan directamente, porque ya sé que todas te dicen que sí al instante...
-Porque soy irresistible -dijo él acercándose más, dejándome apoyada en la pared
-Yo iba a decir porque son putas, pero sí, ponele que sos irresistible

-No te aguantás que una chica te ignore -le expliqué acariciándole la mejilla para luego darle unas palmaditas suaves-. Ahora, ¿me dejás tranquila?  

-¿Qué? -pregunté- Es medio patético que andes rogándole a una chica para estar con vos, ¿sabías? -no lo dejé responder- Como sea, ahora lo sabés

Fin del flashback

-Está bien -dije. Sólo con que lo haya dicho me conformaba, no me esperaba que él me pida perdón por... bueno, por nada.
-¿Te hice muy mal? -preguntó él
-Me dejaste sin aire, idiota
Él bajó la mirada.
-Perdón, en serio -dijo y me miró de nuevo
-No te preocupes -sonrió y miró mis labios.
...



Capítulo 8- Abdominales comestibles

 
 
-¿Eso te lo hice yo? -se acercó un poco a mí
-¿Qué cosa? -pasé un dedo por mis labios
-Te sale sangre, ¿no te duele? -dijo él. Miré mi dedo índice y tenía una pequeña mancha roja. En realidad, ahora entiendo por qué me dolía un poco el labio. Supuse que era por el frío, ya que estábamos en invierno y siempre se me partían los labios o me los mordía.
-Creo que es cuando te mordí -sonrió pícaro

Flashback
-No te pongas nerviosa, linda -una de sus manos volvió a bajar a mi cintura, me rodeó completamente llegando al otro lado y me pegó más a él. Ahora ese insoportable calor estaba en todo mi cuerpo.
Se acercó un poco más y mordió mi labio con suavidad. Luego lo soltó lentamente y me sonrió de lado al ver mi cara confundida, desconcertada e hipnotizada.
Fin del flashback


-Eso no fue tan bueno -dije bajando la mirada
Él sonrió tiernamente y tomó mi rostro con sus manos suaves. Hizo que lo mirara y se acercó más a mí. Su mano seguía en mi mentón y él me miraba fijo a los ojos.
Bueno, lo cierto es que soy realista conmigo misma, pero nunca creí admitir esto. ¡QUIERO QUE ME BESE AHORA!
Sonrió de lado y comenzó a ladear su cabeza acercando mis labios a los suyos. Me estaba manejando, Dios... es que sus labios son tan raramente perfectos... son tentadores. ¡Puto! ¡Besame ahora!
Sonrió nuevamente y cerró los ojos. Juntó su boca con la mía y me besó lentamente. Mis ojos se cerraron en un instante y le seguí el beso feliz. No es que él me guste, pero amo como besa, es muy perfecto, muy delicioso, es... precioso. Besa de maravilla.
Su pulgar acarició débilmente mi mejilla mientras sus labios seguían guiando los míos. Me separé de él muy a mi pesar luego de pensarlo.
-¿Por qué me besás? -pregunté
-Porque me encanta besarte -susurró él sonriendo de lado
-No me uses, Justin. No soy un juguete
-Nadie dijo lo contrario, gatita
Suspiré.
-Creí que eramos amigos y ya -dije sin mirarlo
-Es que estás muy...
-Justin -el tono firme de Pattie nos interrumpió. Estaba mirándonos desde la puerta que iba al pasillo. En realidad, miraba a Justin
-¿Sí? -dijo luego de separarse de mí
-Quiero que hablemos. Ahora
-Yo... voy a mi habitación -dije levantándome. Pasé por la otra puerta para no cruzarme con Pattie. ¿Nos había visto besándonos? ¿Se enojó por eso? ¿Ahora le caigo mal? Dios, quiero saber qué pasa.
Mi casa tenía, una sala de estar, en la que podías ir: por una puerta al garage y puerta principal, otra en la que se iba al pasillo, y de ahí a mi habitación, y otra en la que ibas al comedor y luego a la cocina. A través del pasillo, entré al baño y me quedé escuchando cómo hablaban en el comedor.
-¿Qué es eso de 'gatita'? -preguntó Pattie en un tono enojado
-Mamá... -se quejó él
Ella suspiró.
-Justin, entiendo que... no, en realidad no entiendo. No podés jugar con todas las chicas lindas que se te crucen. Y Jessica no es la excepción. Quiero que la trates como se merece
-Mamá, sólo fue un beso, nada más
-A no ser que te guste, no deberías besarla
-Y ¿quién dijo que no me gusta?




Son como las siete de la tarde, mamá ya llegó y está hablando con Pattie mientras cocinan, y Justin se está bañando. Yo, en cambio, estoy acostada en mi cama pensando si el mujeriego de Justin me quiere y si a mí tendría que importarme. Todavía no dejaba de darle vueltas a lo que dijo Justin. <<¿Quién dijo que no me gusta?>> ¿Eso qué quiere decir? ¿Qué se supone que tengo que pensar? ¿Le gusto? ¿Me gusta a mí también? ¿Sólo lo quiero por sus labios tentadores o lo quiero de verdad? ¡Son muchas preguntas! Y no tengo respuestas.
El sonido de la ducha paró y se escuchó cómo se abría la puerta del baño. Justin venía hacia mi habitación, y yo estaba así. En fin, ver sus abdominales no me molesta mucho, pero...
Me paré e hice como si estuviera acomodando mi habitación. Sentí los pasos de Justin impactar sobre el parquet y luego como sus manos taparon mis ojos.
-¿Quién es? -pregunté con tono obvio, más por obligación
-El mounstruo del lago Ness -respondió él, me destapó los ojos y me dio un beso en la mejilla
No pude evitar sonreír y lo vi con un pantalón largo y sin reme... ¡ay, Dios, estaba sin remera! Bueno, al parecer el tiempo en el que no estudiaba no lo desperdiciaba... lo usaba para hacer ejercicio y fortalecer esos comestibles abdominales que estoy mirando descaradamente cuando DEBERÍA QUITAR MI VISTA DE ALLÍ pero me es imposible. Es que son tan cuadrados y... reales y... perfectos...
-Si... todas hacen lo mismo -afirmó él sonriendo mientras tomaba una camiseta blanca
-¿Todas? ¿Hacer qué? -pregunté diciéndole 'adiós' a la buena vista
-Mirar así -bajó su mirada señalando su abdomen y me miró sonriendo. Yo estaba confundida, ofendida y totalmente avergonzada como para seguir el hilo de la conversación y se me hacía bastante difícil saber si era una broma, si lo decía en serio o si estaba buscando llevarme a una noche de sexo salvaje en mi cama. También me era difícil saber por qué seguía mirándolo como una idiota y qué estúpidas ideas pueden causar unos riquísimos... quiero decir, formadísimos abdominales en mi cabeza.
-¿Qué? -logré articular
-Sólo bromeaba -negó con la cabeza aún sonriendo
...


Hoooli c: bueno, les subí dos capis porque hace mucho no subía... pero ¡quiero que comenten! ¿Si? Gracias a las que se hicieron seguidoras ♥

Respuestas:
Stephania smith: gracias por leer! :)
Virginia: no, yo tampoco lo creería jajajaja
Belu: acá, y en twitpic <3 pasa que en twitpic comentan más rápido, sino subiría al mismo tiempo..

Bueeeeeeno, quiero avisarles que empecé de vuelta las clases y ya clavé un 3 en matemática y se me va a hacer difícil subir, no en esta nove, sino en las otras. Pero lo más probable es que escriba en los fines de semana y publique de a dos o tres capítulos, no sé. Supongo. Espero. Serían como mini-maratones :D

Besos,
Solcy

PD: +6 comments? :)

jueves, 26 de julio de 2012

Capitulos 4, 5 y 6

Capítulo 4- As long as you love me



-¿No podés darme el gusto de besarme una sola vez? -tomé su rostro entre mis manos
Le di un suave beso sin abrir la boca. Duró unos pocos segundos, y en cuanto él quiso abrir su boca y se emocionó más abrazándome yo me separé.
-Bueno... am... -se quedó algo confundido- no esperaba que me digas que sí, la verdad...
-¿O sea que no te gustó? -pregunté para desafiarlo, con una ceja levantada
-No, no, no es eso... en realidad, yo pensaba que sería algo más...
Miré a Christian, se estaba aguantando la risa sentado en un banco.
-Chris -dije, y él me miró rápidamente. Le hice una mirada de súplica y él sonrió. Comenzó a acercarse a nosotros.
-Espero que la próx... -Justin empezó a hablar pero Chris lo tomó del brazo y comenzó a arrastrarlo lejos de mí. Justin bufó.
-Nos vemos -dijo con su típico tono seductor, tomó mi rostro con una mano, y me dio un beso sobre los labios
-Basta -dije empujándolo lejos de mí y dejando que Chris se lo lleve
-Después hablamos -me dijo él -Chris- empujando a su amigo hacia la puerta, que al final se rindió para no quedar como un desesperado. Pero era obvio que moría por besarme.

Al día siguiente, al llegar al colegio, estábamos esperando para entrar al salón de economía. Todos hablaban y estaban en sus cosas, mirando alrededor, preguntando si hicieron la tarea, haciéndola... hablando de lo que pasó estos días... en fin. Yo estaba en lo mismo con Paula y Julia. Lucía todavía no llegaba, y hasta creí que iba a faltar.
Estaba de espaldas a la escalera por donde se venía a este salón, por lo que cuando todos miraron hacia allí, tendría que darme vuelta y no lo haría. Pero cuando me miraron a mí, yo miré a mis amigas. Ellas me miraron con esa estúpida sonrisa pícara, que ya me estaba hartando. Julia me hizo una seña disimulada para que mirara atrás mío, pero ya era tarde, si es lo que supongo.
Unos brazos rodearon mi cintura y al girar mi rostro ahí estaba él. Aún desde atrás me dio un beso cerca de los labios haciendo que mis mejillas se calienten rápidamente.
-Mmm... -me quejé empujándolo sin verlo a la cara
-¡Epa! Hay amor -dijo Chaz, uno de mis amigos y compañeros de clase. Lo miré mal y él me guiñó un ojo
-¿Será cierto? -me susurró Justin al oído
-No, sólo me querés para un rato y después de cansarte buscar otra -le dije sonriendo cínicamente, típico de ambos
-¡Uuuh! -exclamaron todos
Yo volteé los ojos y él me miró. Tomó mi mano y tiró de ella hasta arrastrarme detrás de una columna.
-¿Hasta cuándo vas a seguir? -le pregunté cansada
Ya era mucho, besarme cuando no quiero, llevarme a todas partes, hacer lo que él quiera, tratarme como si fuera su novia... No sé por qué se preocupa tanto, si sólo soy una más para él.
-Hey, yo iba a preguntar eso. ¿Hasta cuándo vas a seguir?
-¿Seguir con qué? -pregunté molesta
-Seguir negándote -explicó acercándose un poco
-Hasta que dejes de molestarme y entiendas que no quiero nada con vos -le repliqué con una mano en su pecho: no quería que se acerque más
-Pero ayer me besaste -replicó
-No soy un banco de quejas, ¿sí? Lo hice para que no molestes -él rió
-Lo hiciste porque te encanto -dijo él mordiéndose el labio mientras sonreía
-¡No! -miré hacia un costado respirando profundo, para calmarme un poco
Volvió a morderse el labio y puso ambas manos en mi cintura.
-Hace mucho que me amas
Traté de separarlo poniendo mis manos en sus brazos, pero era muy fuerte. Y de paso, me pegó a él, hizo que lo mirara a los ojos, que con el sol de mañana, se veían perfectamente claros y color miel. Abrí los míos dejando que admire mi perfecto azul.
-¿Faltamos a clase? -me preguntó acercándose a mi oído
Cerré los ojos y apoyé mi cabeza en su pecho. No fue mucho lío porque lo tenía a milímetros de mí.
-No -dije
Aún con los ojos cerrados, ya que moría de sueño. Odiaba levantarme temprano.
-Podemos pasear por ahí -dijo con voz seductora
-No, dejame -reaccioné y me separé de él. Sus brazos estaban flojos, por lo que no pudo detenerme a tiempo.
-Espera... -me tomó del brazo
-Dejame -dije soltándome bruscamente
Entré al salón, junto con los últimos alumnos. Afortunadamente la profesora estaba escribiendo algo en el pizarrón, por lo que no nos vio entrar. Miré a Julia y a Paula. Ambas estaban sentadas juntas. Las fulminé con la mirada.
-Levine y Bieber -dijo la profesora mirándonos-. Siéntense juntos, en esos bancos
Volteé los ojos. ¿Esto es posible? Trato de evitarlo y me sientan con él. Todos nos miran mientras él me sonríe orgulloso y pone una mano en mi cintura para empujarme. Yo salí de su agarre y me senté en uno de los bancos que estaban en frente de mis amigas. Ellas reían y Julia señaló con la mirada a Justin, quien daba la vuelta para sentarse a mi lado, del lado de la pared. 
-¿Qué hacían allá afuera? -preguntó pícara
Paula le pegó en el hombro, pero no pudo evitar reír. Justin las miró y sonrió cómplice.
-Bobas -dije volteando los ojos, y sentándome mirando al frente
-¿Por qué las insultás? -preguntó Justin- Sólo quieren saber -dijo inocente
-Gracias por defendernos, Bieber -dijo Julia
-Ya, no la molestes -escuché a Paula
-No creo que haya problema en saber que querías venir a mi casa pero no te dejé
-En cualquier momento te pego -murmuré para mí misma
-Quiero verte hacerlo -susurró él en mi oído sorprendiéndome por haberme escuchado
-No molestes -dije entre dientes mirando hacia otro lado
-Bieber, pase a hacer el ejercicio de tarea
-No lo hice -respondió él
-¿Levine? 
-Sí, enseguida voy
Saqué mi carpeta y pasé al frente a resolver el ejercicio, que hice bien. Julia me sonrió y Paula miraba su hoja preocupada.
-No entiendo qué hice mal -dijo mirando la hoja de Julia una y otra vez comparándola con la suya
Reí y saqué mi celular de la mochila. Lo escondí atrás de mi pierna, del lado que estaba entre Justin y yo. Comencé a mandarle un mensaje a Lucía diciéndole por qué había faltado.
-No se usa celular en clase -dijo él en un tono alto
Todos me miraron y yo lo miré mal a él. Bueno, muy mal. La profesora nos miraba.
-Entrégeme el celular -dijo viniendo hasta nuestro asiento
Se lo dí ante la mirada de todos y ella volvió a su escritorio. 
-Quiero que hagan los ejercicios que quedaron de la clase pasada ahora. Vamos, así los corregimos
Todavía no creía lo que este imbécil había causado.

Una vez que terminó la clase, salí apurada evitando al estúpido de Bieber. Pero él tomó mi brazo y me arrastró a un lugar.
-¿Y ahora qué? -pregunté enojada
-No te vas a enojar por eso, ¿verdad? -dijo él sonriendo burlón
-No te voy a felicitar -le pegué en el pecho, ya que era lo más cerca suyo que tenía 
Él tomó mi mano y me acercó a él de un tirón.
-Te pido un favor -dijo susurrando sobre mis labios-. Dame un beso, un beso en serio
-¿Otra vez? Creí que ya había dejado en claro que no quería que me molestes
-Dios, quiero un beso tuyo, tus labios me vuelven loco -dijo, pasando sus manos por mi cintura, y atrayéndome más a su abdomen
Miré sus ojos. Parecían decir la verdad. Buscaban los míos y luego mis labios. Miré los suyos y los había humedecido hace segundos. Tomé un leve suspiro.
-¿Si? -insistió él
...




Capítulo 5- Besos adictivos, chicos irresistibles 



Me mordí el labio. ¿Lo haría?
-Está bien -me rendí
Nunca creería que Bieber llegaría al punto de rogar por un beso mío. Es decir, ¿tan genial soy? Bah, sólo bromeo conmigo misma.
Él sonrió y acercó su boca a la mía. Atrapó mis labios suavemente y yo dejé que los atrape. Era raro, hace mucho no besaba algún chico de esta forma, sintiéndome rara, sintiendo vacíos en mi estómago, creyendo que este beso era en serio por un momento.
Besaba de maravilla, lenta pero intensamente. La forma en que manejaba la situación era genial. Introdujo su lengua en mi boca, juntándola con la mía haciendo que no quiera separarme de él. Todo era genial, sus manos estaban firmes bajo mi cintura, las mías sobre sus hombros. Dios, como besaba... me volvía loca. Se separó de mis labios y repartió una hilera de besos por mi mejilla, hasta llegar a mi oído.
-Tus besos son adictivos -me susurró, haciendo que me estremezca
Pero no, no caería. Sabía que él sólo quería besarme y yo no llegaría a nada, porque era para estar con alguien. De su parte, porque yo lo hice por el simple hecho de que deje de molestarme. Aunque no me arrepentía e incluso sentía que él sentía algo más por mí, no me dejé llevar por mis sentimientos, le corté el rostro como diciendo 'te felicito'.
-Bien, ya tuviste lo que querías, ¿no? Ahora, ¿puedo irme?
-No tan rápido, gatita. Antes quiero que me digas algo...
-¿Qué? -volteé los ojos
-¿Te gustaría cenar conmigo? Hoy, en el muelle
-¿Sólo nosotros dos?
-Sólo nosotros dos -repitió sonriendo
-Voy a pensarlo -dije y comencé a caminar
-No te hagas rogar más -escuché a alguien decir, después de unos minutos caminando hacia el próximo salón. Supuse que no era para mí, por lo que seguí caminando. Hasta que alguien puso su mano en mi hombro haciendo que girara mi rostro. Chris ya estaba a mi lado.
-¿Me escuchaste? -preguntó
-No, ¿qué dijiste?
-Que no te hagas rogar más
-¿De qué hablás? -reí
-Con Justin, boba
-Ah. ¿Y por qué?
-Yo no diría que le gustás, pero le 'atraés'. No diría que quiere algo serio, pero algo quiere. Tampoco diría que confíes en él, pero dejate llevar. Y jamás diría que te hagas rogar, porque se va a cansar
-Que se canse, no me importa. Yo no soy la que gusta de él
-Yo dije atraer
-Como sea -levanté un hombro con desinterés
-Lo digo, porque su rutina es simple: ¿quiere estar con alguien? Insiste. Si en cuatro días no logra un beso, lo deja. Busca a alguien más y ya está. Pero...
-¡Chicos! -una chica nos interrumpió
-¿Qué pasa, Cait? -preguntó Chris
Caitlin era la hermana de Chris, era simpática, aunque algo sosa. Quiero decir, patética. La forma en que se vestía no era lo más genial que podías ver, ni tampoco era genial. Estaba en nuestro curso y gustaba de Justin, según me enteré. Pobre inocente...
-Perdón por interrumpir, sólo quería decirte algo, Jess -me miró poniéndose a mi lado
-¿A mí? ¿Qué? -la miré
-La profesora de economía te llama
-Ah, gracias -le sonreí-. Nos vemos, Chris
-Sí, nos vemos -respondió él
Volví mi camino hacia el salón anterior y en el, vi a Bieber. Estaba hablando con la profesora, y al salir no vio mi presencia. Dió unos pasos acelerados hacia, según vi Cintia, y la abrazó por detrás. Ella se giró y le sonrió. Lo besó en los labios y él bajó sus manos a su trasero.
Puta, pensé.
-Señorita Levine, ¿va a venir a buscar su celular?
Reaccioné y entré al salón.




¿Salir a cenar con el mujeriego de Bieber? Ni siquiera entiendo cómo me planteé pensarlo. Es un completo imbécil. Atención, dije completo.
Al día siguiente, cuando llegué al colegio,  Bieber ya estaba ahí. Me sonrió y me miró pícaramente pero yo lo evité. Mis amigas aún no habían llegado así que fui con Chaz y Chris.
-Hola -los saludé
-Hola -dijo Chaz
-Buenas -respondió Chris sin quitar la vista de su celular
-¿Todo bien con tu novio? -preguntó Chaz
-Que yo sepa no tengo -me encogí de hombros
-Habla de Justin -aclaró Chris
-¿Bieber? No tengo nada con ese mujeriego -levanté un hombro indiferente
-Si seguís así -comenzó Chris- va a empezar a molestarte
-¿Qué? -pregunté
-Digo, va a... -alguien lo interrumpió
-¿Y, gatita? ¿Ya lo pensaste?
-Bueno -lo miré- en realidad lo de "pensarlo" era más una excusa para no decirte que no en el momento
-¿Qué clase de excusa es esa? -respondió él riendo, mientras se acercaba a mí y yo me alejaba
-No quería negarte tan directamente, porque ya sé que todas te dicen que sí al instante...
-Porque soy irresistible -dijo él acercándose más, dejándome apoyada en la pared
-Yo iba a decir porque son putas, pero sí, ponele que sos irresistible
Chaz y Chris trataron de ocultar su risa, y pude ver que Lucía ya había llegado y estaba en su misma situación. Justin suspiró mirando hacia otro lado.
-¿Eso es un no? -preguntó algo molesto
-¿Todavía no te queda claro, Biebercito? -pellizqué su mejilla burlonamente
-¿Biebercito? -repitió más molesto y asombrado
-No te aguantás que una chica te ignore -le expliqué acariciándole la mejilla para luego darle unas palmaditas suaves-. Ahora, ¿me dejás tranquila?
-Serás perra... -murmuró él, haciendo que le pegue una cachetada- ¡Hey!
-¿Qué? -pregunté- Es medio patético que andes rogándole a una chica para estar con vos, ¿sabías? -no lo dejé responder- Como sea, ahora lo sabés
Apretó sus labios y me miró con odio. Todos nos estaban mirando y yo lo estaba "humillando". Como si él no lo hiciera sólo...
Se acercó más a mí y antes de que pudiera evitarlo me besó presionando sus labios firmemente contra los míos. Abrió su boca pero yo me negué a abrir la mía, tenía mis manos en su pecho para tratar de alejarlo de mí, pero era en vano, tenía más fuerza. Pellizcó el área de mis costillas de repente, haciendo que abra la boca y le siga el beso.
Después de unos segundos ya me estaba quedando sin aire, pero él parecía estar bien. Traté de separarlo nuevamente de mí pero me era imposible. Quise separar al menos mis labios pero sólo lo logré un segundo, donde apenas pude respirar un poco para que él vuelva a atrapar mis labios.
Empecé a sentirme algo mareada...
 



Capítulo 6- Celos entre amigos


Empecé a sentirme algo mareada... y sentí como Justin se separaba de mí rápidamente. Abrí los ojos y todo me daba vueltas.
-¿Sos idiota? ¡Casi la matás! -le dijo Chris a Justin teniéndolo de la camiseta
-Eh, no fue para tanto. La zorra esta se cree que puede dejarme así en frente de todo el mundo
En su momento ya lo voy a matar, ahora estaba algo preocupada porque me estaban acostando en el suelo. Concretamete, Chaz.
-¿Estás bien? -me preguntó
-Me duele la cabeza -dije frunciendo el ceño-. ¡Porque ese estúpido...!
-Eh, no digo que no sea estúpido, ni mucho más -me interrumpió Chaz- pero no es el momento
-Voy a llamar a la profesora -dijo Lucía


Y acá estoy, en mi casa. Mamá tuvo que venir a buscarme y lo peor, tuve que decirle a ella y a la profesora que empecé a marearme de la nada. Estúpido Biber...
Estaba acostada en mi cama cuando mi celular sonó. Lo tomé y le bajé el volumen a la tele.
-¿Hola? -dije
-¡Jess! Te llamé antes pero no contestabas, ¿cómo estás?
-Es que estaba durmiendo. Bien, gracias
-Bueno, ¡tengo buenas noticias!
-¿Si? Decime, necesito algunas
-Bueno... ¡convencí a un lindo chico a que vaya a cuidarte!
-¿Qué? -empecé a reír
-No te rías, me lo vas a agradecer
-Ya, pero decime quién es. ¿Chris? ¿Liam? ¿¡Lucas!? -pregunté el último con más emoción, puesto que era el chico de quinto que a todas nos gustaba y se partía solo.
-No sé, no sé... -jugó- Ya lo vas a ver
Alguien tocó la puerta de mi cuarto.
-Esperá, tocan mi puerta
-No, si ya me imagino quién es
Reí y me levanté a abrir.
-Hola -me sonrió él
-¿A Bieber? ¿¡MANDASTE A BIEBER!?
-Tranquila, gatita -dijo él riendo
-¡Lucía...! Decile que deje de decirme así
-Bueno, yo creía que se iban a llevar mejor, pero... -Justin tomó mi teléfono, cortó y lo lanzó a la cama
-¿Qué haces? -pregunté. Cerré los ojos por un momento. La cabeza volvía a dolerme.
-Tu amiga Lucía dijo que venga, y no tuve problema en eso -se encogió de hombros
-Qué lástima, porque yo sí lo tengo. Quiero que te vayas y me dejes en paz de una puta vez
-¿Por qué? Sos la única que me dijo que no todas las veces, y ya me cansa estar insistiéndote
-No lo hagas más -dije con desinterés y me senté en mi cama
Él suspiró.
-Está bien. Decime, decime por qué -se sentó a mi lado
Tomé aire y me senté mirándolo.
-Mirá, no sé qué es lo que querés conmigo, pero... -me interrumpió
-No entiendo por qué no querés ni verme, cuando otras chicas mueren porque las mire
Reí burlona.
-¿Una de las razones? Sos mujeriego. Y eso es algo que no soporto. Que te creas genial y me beses cuando quieras, es otra cosa. Puede ser divertido al principio, pero ya es aburrido y, atención en esta parte, quiero que dejes de hacerlo -él iba a hablar pero no lo dejé-. Dejame, no quiero nada con vos
Él bufó y me miró a los ojos.
-¿No te parezco lindo? ¿Tengo... feos ojos o qué?
-¿Feos ojos? -repetí riendo
-Las chicas siempre se fijan en eso -dijo él encogéndose de hombros
-Sos un bobo -reí. Él levantó una ceja-. Podemos ser amigos -le ofrecí
-¿Y podemos besarnos?
-No, dejá de insistir con eso -volteé los ojos
-Sí, sé que quedo mal insistiendo tanto, es que... sos muy sexy -me sonrió de lado
-Suficiente charla como personas decentes, podés irte -me levanté de la cama
-Está bien, está bien. Seamos amigos. Pero te advierto que no es lo mejor que te pueda pasar -me siguió hasta la puerta
-¿Quién te abrió? -lo ignoré
-Tu mamá. Y tu casa es linda -lo miré sonriendo-. ¿Eso es un avance? -me miró confundido
-Nos vemos, Justin
-Nos vemos -sonrió y se dio vuelta, comenzó a alejarse en el pasillo. Se rascó la nuca, y volteó a verme, encontrándome recostada en la puerta mirándolo. Levanté una ceja al verlo y él sonrió y me guiñó el ojo. Sonreí y bajé la mirada, para luego cerrar la puerta. Al parecer era un chico 'tierno' si se lo proponía. Pero en fin, no voy a juzgarlo antes de que lo conozca bien.
Me recosté en mi cama y recordé lo que dijo.

-¿No te parezco lindo? ¿Tengo... feos ojos o qué?
-¿Feos ojos? -repetí riendo
-Las chicas siempre se fijan en eso -dijo él encogéndose de hombros

¿Qué? ¿Le preocupa si creo que soy lindo? Reí de tan sólo pensarlo. ¿Le parezco linda?


Al día siguiente, me levanté. No sé por qué, hoy tenía ganas de ir al colegio. Supongo que estaría feliz por lo de Justin, al fin me dejaría en paz.
Después de ponerme el uniforme, y desayunar, mamá me llevó al colegio. Bajé del auto luego de saludarla y me dirigí a la entrada con la mochila colgada del hombro.
-A sí que ahora sos amiga de Justin -dijeron detrás mío
-¿Y qué con eso? -pregunté riendo
-Nada, nada. No me mates -dijo Chaz haciéndose el inocente-. ¿Estás mejor después de semejante beso que te plantó?
-Sí, lo estoy -lo empujé, haciedo que pierda el equilibrio y riera. Él volvió a mí y me dio un beso en la mejilla.
-Uh, mirá. Bieber se pone celoso -señaló hacia el frente con la mirada
Estaba Justin besando una chica, como solía hacerlo conmigo. Ella estaba sobre la pared y él con sus manos en la cintura de ella. Y ahora que veo bien, la chica es Lorena, una de mi clase.
-No está celoso, está besando a una chica -dije sonriendo. Recuerdo cuando su lengua se juntó con la mía y... un momento. Cachetada mental. Listo, eso era lo que necesitaba.
-Recién te miraba -afirmó él seguro
-Me imagino -rei
-¡Lo digo en serio! -dijo él
-Ahá -lo ignoré a propósito
-En serio. Mirá.
Chris pasó por su lado y nos saludó con la mano. Yo le sonreí y Chaz le dijo que venga con una seña.
-¿Qué hay? -preguntó él acercándose
-¿Me hacés un favor? -le dijo Chaz luego de hacer un saludo de manos
-Seguro, decime
-¿Podés besar a Jess?
-¿EH? -dije rápidamente. Chris me miró y sonrió de lado. Dios, su sonrisa era muy linda. Al instante sentí calor en mi rostro
-Si ella está de acuerdo... -dijo Chris y se acomodó la mochila que le caía en el hombro
-¿Qué? -dije- Yo no creo que haga falt... -Chaz me interrumpió
-Sí, ella acepta. ¡Justin! 
Chris lo miró confundido y Chaz le susurró un '¡Ahora!', empujándolo un poco hacia mí. Para cuando vi a Justin separándose de la chica Chris ya estaba besándome. Al principio no quería besarlo, pero después me fui centrando en eso. Era lindo, me besaba con suavidad. Aunque se notaba que no había nada en ese beso, era tierno. Sus manos estaba un poco más arriba que mi cintura, y estaban extendidas, firmes sobre mí.
Mis manos pasaron de estar en sus hombros a su pecho, empujándolo con suavidad. Con él no hacía falta forcejear como Justin, no me presionaba, sólo me besaba.
Chris se separó de mí y sonrió tiernamente al verme sonrojada.
-Hey, Chris -se escuchó a Justin-. ¿Qué hacían?
-¿Celosito, Biebs? -dijo él y luego me miró. Me guiñó un ojo y se acercó a mí-. Besas bien, nos vemos -me dio un beso en la mejilla y se fue.
-¿Qué fue eso? -preguntó Justin
-Parece que sí estás celoso 
-No lo estoy
-Se nota, amigo -remarqué la última palabra y pasé esquivándolo mientras ponía mi mano en su hombro.
... 


Bueno, he aquí el maratón. Espero que les haya gustado ^^  Bienvenidas las nuevas lectoras! Y para hacerse seguidoras tienen que ir al escritorio y al lado de la lista de blogs que siguen, clickear el botón 'Añadir' y ahí escribir la dirección del blog :)

Besos,
Solcy

miércoles, 18 de julio de 2012

Capítulos 2 y 3

Capítulo 2- ¿Nosotros? 
 
-Te cabe por idiota -murmuré para mí misma riendo en silencio
-¡Pero, profesor! ¡Juro que no fue a propósito! -escuché decir a Justin, lo que mi hizo sonreír
-Estúpido -dije
-Mmm... Jess -dijo Lucía negando con la cabeza mientras reía
-¿Qué? Se lo merecía -me encogí de hombros
Ella rió.
-¿Te gusta? -la miré raro
-Tendrías que dejar las drogas -dije asintiendo
Ella volvió a reír.


-Uh, ahí viene tu novio -dijo Paula señalando disimuladamente con la cabeza hacia atrás mío
Miré y venía Justin caminando firmemente hacia nosotras. Reí con ironía. ¿Y qué le pasa ahora? Se notaba que estaba enojado, se veía en su mirada. Que se joda, pensé, y volví mi mirada a las chicas.
-No es mi novio -dije tranquilamente. No quería que piensen que me desesperaba o algo por lo que digan de nosotros. Bueno... no esa clase de nosotros. Al decirlo así suena como: no me importa qué digan de nuestra relación. Lo amo, lo amo, mmm, mmm. No, no hay relación.
Me desvío mucho de los temas...
-Parece que está enojado... -canturreó Julia
Sentí cómo me tomaban del brazo y me arrastraban. Miré a las chicas, que se miraban entre ellas cómo diciendo '¿qué irán a hacer ahora?' pero así, pícaramente. Podrían dejar de mirarse así y defenderme. Volteé mi rostro para comprobar que era Bieber, y claro, quién más.
-¿Qué hacés? -dije tratando de que me suelte
-¿Sos estúpida o qué? -me preguntó soltándome de repente entre él y una pared. Estábamos en un rincón al fondo del pasillo, casi nadie venía aquí a esta hora, porque habían pocos salones ya que era el último piso antes de poder salir del colegio.
-Me hiciste mal -dije acariciándome el brazo-. Qué bruto
-No lo hubiese hecho si no me desafiaras así
-¿Desafiarte? -pregunté con las cejas levantadas, pero con una fea mirada
-Sí, nena. Me ligué un castigo para este sábado, y tenía planeadas otras cosas, así que... -lo interrumpí
-¿Coger con putas? -dije riendo un poco
Él se acercó peligrosamente a mí amenazándome con la mirada.
-No me fastidies -dijo-. Iba a ir a una fiesta, y como vuelvas a hacer una cosa así de dejarme mal con un profesor... -volví a interrumpirlo
-Más de lo que hacés vos sólo...
Levantó mi mentón y me obligó a mirarlo.
-Te arrastro conmigo al castigo. ¿Entendiste, gatita?
-Basta, me haces mal -lo empujé un poco, pero volvió a acercarse
-Te pregunté si entendiste -susurró en mi oído, mientras yo giraba la cabeza hacia un costado: estaba muy cerca de mí y eso me incomodaba. Sentía calor en mis mejillas y en todo mi cuerpo
-Dejá de amenazarme, ¿si? Ya entendí, ahora andate -quise volver a empujarlo, pero sólo logré que tome mis muñecas y me haga mirarlo. Gran error: me dio un pequeño beso rápido en los labios y se fue soltándome de repente
-¡Idiota! -grité con rabia
Caminé nuevamente hacia donde estaban anteriormente las chicas. Lindas, que me dejaron con ese estúpido, creído mujeriego. Como lo encuentre le pego la cachetada de su vida. Fui hacia el próximo salón, tenía biología ahora y lo último que quería era llegar tarde.
-Jess -volteé, ahí estaba Christian sonriéndome
Su sonrisa es tan linda... él es uno de los amigos de Bieber. Pero no es tan como él. Bueno, no es nada como él. Es tierno, no mujeriego. Y su sonrisa... ah, ya dije esa parte.
-Hola, Chris. ¿Qué pasa? -le pregunté
-Bueno, sabés que mi cumpleaños es... -lo interrumpí
-En cinco días -dije orgullosa. Tengo buena memoria para fechas. Siempre y cuando no sean de historia o cosas aburridas y poco importantes
-Sí -rió suavemente-. Voy a hacer la fiesta en el Madison's Hill. ¿Creés que puedas ir? -me entregó una tarjeta
-Voy a hacer lo posible, Chris. Gracias -le dediqué una sonrisa
-A vos, linda. Nos vemos -nos saludamos y se fue
Él iba al otro curso, y siempre hablábamos al cruzarnos. No sé cómo me mantuve tan tranquila, no logro hacerlo con muchas personas. Sé que soy un poco quisquillosa, es que... no lo sé. Soy así.
Me quedé concentrada leyendo la tarjeta que Chris me había entregado.
Te espero este día especial, 22 de junio en Madison's Hill para festejar mi cumpleaños. A las 19...
Alguien me chocó. Vi que era el estúpido este. Pasó sin mirarme, pero estoy segura que me chocó a propósito.
-Hey, espera -lo tomé de la camiseta
Él al verme hizo un movimiento rápido y me dejó otra vez contra la pared.
-¿No podés dejarme tranquilo, gatita? -dijo cerca de mi rostro
-Agh, no te acerques tanto -lo empujé un poco-. Vos sos el que no deja de molestarme: primero lo del salón, después en el pasillo y ahora me chocás. ¿Tanto dependés de mí? -solté una risa irónica
Él rió de la misma forma.
-Te vuelvo loca, ¿no? -se acercó a mi oído-. Ni respondas, ya sé la respuesta
-Entonces sabés que no -lo alejé de mí
-¿Ah, no? -mordió el lóbulo de mi oreja
Cerré los ojos y los abrí lentamente cuando lo sentí alejarse un poco, y lo vi sonreír orgulloso. Había caído. Agh, soy estúpida en serio.
-¿Qué sonreís así? -le pregunté levantando levemente un hombro- Y ya dejá de mirarme
Lo empujé y comencé a caminar lejos de él. Pero a los segundos sentí como palmeaba mi trasero. Y con eso... digamos que me saqué un poquito.
-¿¡Qué carajo hacés!? -me volteé a mirarlo, él reía por mi reacción
-Epa... esa boquita -se burló
-¡Idiota! ¡No soy de esas putas con las que estás siempre, ¿no lo entendés?! No estoy comiéndome tres chicos en el mismo día. ¿TE DAS CUENTA O TE LO EXPLICO OTRA VEZ?
-Tranquila, gatita.
-¡Y no me digas así! ¿Qué me ves cara de gato?
Sonrió pícaramente. Claro, él lo entendió con doble sentido, es decir, cara de puta.
-Agh, mejor no respondas -dije, y esta vez él quedó entre la pared y mi cuerpo-. Pero no vuelvas a hacer o intentar nada relacionado a tocarme porque te juro que...
-¿Que, qué? -me interrumpió
-Te pego
-Ah, por favor no -fingió burlándose
-Hablo en serio -ya me había calmado un poco
-Yo también. Mirá cómo te toco
Me giró rápidamente dejándome acorralada y con sus manos recorrió toda mi silueta, hasta mis caderas. Sentía un inmenso calor en mis mejillas, pero él no me miraba a los ojos, estaba recorriendo mi cuerpo con su mirada.
-Linda estás, gatita. ¿Ahora qué me vas a hacer? -me desafió
Levanté mi rodilla ágilmente y esta se detuvo al llegar a su entrepierna, dejándome escuchar su estúpido grito de dolor. Suena muy cruel... pero no me cabe duda de que va a ser un violador en el futuro.


-¿¡En serio!? -preguntó Paula
-Sí, gracias por abandonarme -les sonreí con ironía
-Es que queríamos dejarlos a solas -dijo Julia guiñándome un ojo
-No es justo, siempre te pasan cosas interesantes con chicos interesantes -se quejó Lucía
...



Capítulo 3- Un lindo mujeriego 


 
-No es justo, siempre te pasan cosas interesantes con chicos interesantes -se quejó Lucía
-Es la vida -dije encogiéndome de hombros riendo
-La vida es injusta -se quejó ella
-Igualmente, Justin no es tan lindo -dije
-Sí, es verdad -me apoyó Julia-. Sólo tiene facha*, nada más
-Eso -asentí

Al día siguiente, me levanté sola, algo raro. Siempre me despierta mamá, pero parece que no está. Seguro se fue a una de sus obras. Ella es arquitecta. Cuando no me conocés bien parece que soy una nena rica pero en realidad, me visto así de bien, y todo eso porque mi mamá se esfuerza mucho. Tengo una larga historia familiar que no cuento a nadie.
Me puse el uniforme y llegué al colegio. Saludé a Paula y antes de que toque el timbre ambas fuimos a hablar con otras chicas del curso.
-Hola, Jess -me dijo Carla
-Hola -le sonreí y nos dimos un beso
-Me dijeron que estás con Justin, ¿es verdad?
-¿Qué? -dije confundida, pero medio gritando- No, qué asco -hice una fea cara
-Oh... ¿y no lo besaste?
-Más bien él me besó a mí, pero no fue gran cosa. ¿A qué va esto?
-Es que... él es lindo -admitió riendo
Sonreí.
-Sí, un "lindo" mujeriego -dije
Ella se encogió de hombros
-Sigue siendo lindo -reímos
Después de un rato se fue y yo volteé los ojos.
-Odio cuando son tan putas -dije. Paula rió

[...]

-¿Cómo está la gatita?
-No me jodas -dije molesta
-Ay, no te enojes, linda -sonrió seductoramente
Me quedé mirándolo y le di una cachetada débil pero desprevenida.
-Hey, ¿y eso?
-Andá a molestar a otra, ¿si? -dije tomando una bandeja para el almuerzo
-No puedo
-No, porque ya estuviste con todas y no podés repetir
-Veo que nos entendemos -dijo desde atrás mío
-Sí, eso parece. ¿Te corrés? -dije tratando de pasar entre la pared y él
-¿Y si no me corro qué pasa?
-Te corro yo
-Mejor no. Tengo un lugar para que vayamos -dijo levantando una ceja
-No sé cómo decírtelo. Buscate -a otra -le dije lentamente
-Es que quiero estar con vos -dijo en mi oído
-Mala suerte -lo empujé a un lado
Me senté en la mesa con Lucía, Paula y Julia y ellas me lanzaron su típica mirada pícara.
-Dios, dejen de mirame así -les pedí, ellas rieron y luego miraron sobre mi hombro-. ¿Qué mir...? ¡Justin!
Todos los que almorzaban nos miraron. Es que sí... soy muy gritona y bueno... se dieron cuenta. Justin me cargó sobre su hombro y me llevó hacia algún lado. No sé, sólo veía a la gente mirarme a través del vidrio que separa el pasillo -donde se puede ir al gimnasio, del comedor. Después de eso no había más gente en el pasillo ya que probablemente tenían clases o estaban en biblioteca.
-¿A dónde vamos? -él rió
Sentí sus manos en mi cintura, se agachó un poco y me dejó en el suelo.
-¿Se puede saber para qué hiciste es...?
-Shh -se acercó a mi rostro, y rodeó mi cintura suavemente, y con lentitud-. Sólo quiero estar con vos
-Estar tiene muchos significados -dije sintiéndo calor en mi cuerpo
-Quiero besarte -se acercó a mis labios, pero yo corrí mi rostro
-Yo no quiero hacerlo -dije volviendo a mi posición normal cuando vi que se alejó un poco, sin dejar de rodearme
-¿Por qué? -preguntó algo enojado, cuando la que debería estar así soy yo
-Porque no -lo miré desafiante, como 'a ver qué hacés ahora'
Él sonrió y volvió a acercarse, pero esta vez tomó mi rostro con sus manos. No lo hacía con fuerza, no me lastimaba, pero me ponía nerviosa. Es que... su tono de voz seductor... sí, me volvía loca. Lo admito. Eso, sumado a su perfume, y a que estaba muy cerca de mí... seguro estaba con las mejillas rosadas.
Sus labios rozaron los míos y sentí más calor inundar mis mejillas.
-No te pongas nerviosa, linda -una de sus manos volvió a bajar a mi cintura, me rodeó completamente llegando al otro lado y me pegó más a él. Ahora ese insoportable calor estaba en todo mi cuerpo.
Se acercó un poco más (como si eso fuera posible) y mordió mi labio con suavidad. Luego lo soltó lentamente y me sonrió de lado al ver mi cara confundida, desconcertada e hipnotizada.
Por desgracia para él, al momento reaccioné y lo empujé lejos de mí.
-Te dije que no me molestes

-Espera -volvió a acercarse y a rodear mi cintura
-Basta, Justin. Buscate otra, no quiero estar con vos
-Yo sí... -dijo besando mi cuello
Cerré los ojos un momento, pero luego reaccioné y analicé la situación. Lo separé de mí y comencé a caminar de vuelta al comedor. En cuanto sentí su mano tomar mi brazo me volteé y le pegué una cachetada.
-Dejame tranquila -genial, ya había conseguido enojarme
Llegué a la cantina y todos, y quiero decir todos, me miraron. Los ignoré y volví a mi lugar.
-¿Y? ¿Qué pasó? -preguntó Paula
-Me pidió una tarea y se la tuve que pasar -dije
Todas ellas rieron fuertemente.
-¿Qué? -pregunté tajante
-Ay, Jess, no te pongas así. Solo estamos jugando -dijo Julia mientras comía su almuerzo
-Sí, ya lo sé -dije algo molesta-. Me voy a clases, besitos -las saludé y me fui al gimnasio
-¡No te enojes, Jess! -escuché gritar a Paula
Me di vuelta y le sonreí. Bajé las escaleras. Al llegar al primer piso, estaban los chicos practicando básquet. Algunas chicas de mi grupo ya habían llegado y estaban esperando que ellos terminen.
-Hola, chicas -les sonreí
-Hola, Jess -me respondieron
-¿Practicaron? -pregunté deteniéndome frente a ellas
-¡Bien, chicos! Hasta la próxima clase -se escuchó al entrenador
-Chau, bombón -alguien me dio un beso en la mejilla desde atrás, y se fue caminando hacia la salida. Bieber. Volteé los ojos y vi como las chicas se quedaron mirándome
-¿Y sus uniformes? ¿Qué esperan? -todas se dirigieron a los vestidores a paso lento
-Hola -me saludó Chris
-Hola -le sonreí. Dejé mi bolso en un banco y nos quedamos hablando
-Hey, Beadles... 
-Dios, no me va a dejar nunca -me quejé, mientras Chris reía y miraba a la puerta
-Bieber... ¿qué hay?
-Estábamos por ir a... -me miró- Starbucks -terminó sin mirarlo. Lo desafié mirándolo a los ojos por unos segundos, y luego comencé a caminar
-Chau, Chris -dije
-Nos vemos -mdijo él. Aún no disimulaba su risa
-Hey, espera -escuché la voz de Bieber. Volteé los ojos sin que me viera y seguí caminando- ¿No podés parar? -preguntó con tono molesto
-¿Qué querés? -dije girándome rápidamente
-Gracias -murmuró-. ¿Se puede saber qué te pasa conmigo? 
-¿Disculpa? -pregunté mirándolo mal
-Sí, por qué no querés besarme... y demás
-Ah, nada raro, ni difícil de comprender. Sos un mujeriego, y me caes mal. ¿Todo claro? -me volteé sin dejarlo hablar y seguí caminando
-Espera, por Dios. Basta de caminar -me tomó del brazo y comenzó a caminar cerca de mí, mientras yo me alejaba. No estaba siendo tierno, seguía teniendo ese aire de creerse sexy y superior.
Suspiré pesadamente sin mirarlo, ya estaba entre él y las estúpidas paredes. 
-¡¿Qué?! -dije ya cansada
-¿No podés darme el gusto de besarme una sola vez? -tomé su rostro entre mis manos
...


Tara- rá... suspenso, oh yeah. Chicas, solo una pequeñiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiisima condición. Bueno, no tan así.
Estaba pensando en hacer una maratón más en serio, así como cuatro o cinco capítulos, pero no sé. Para este finde no llego, tengo que hacer el de las otras dos noves. Pero para el que viene sí, si:
+5 comments y +3 seguidoras → 3 capis
+5 coments y + 7 seguidoras → 5 capis
+10 coments y 10 seguidoras → CAPIS POR DOQUIER! Mentira, 9 capis
¿Okis? Hasta el viernes 27/7 tienen para... eso ↑ y el sabado subiria los capis, ¿les parece? Si quieren que recomiende su novela en mi otro blog, díganme. Siganme en twitter♥ @saysninja
*Facha: cuando un chico tiene swag.


Besos, 
Solcy